- 600 alumnos asistirán a una actuación que busca extender el concepto de ‘no violencia’ por los centros educativos
La lucha contra la pobreza estructural que genera el hambre, la difusión de la cultura no violenta y su aplicación a todos los ámbitos sociales, sobre todo al escolar, son objetivos de la campaña internacional NoViolencia 2018 en la que colabora el Cabildo de Gran Canaria.
En el marco de esta acción colectiva internacional, el Cabildo apoya las iniciativas que fomentan la denuncia de situaciones de pobreza estructural y despiertan y promueven compromisos contra las injusticias, informó el consejero de Solidaridad Internacional del Cabildo de Gran Canaria, Carmelo Ramírez.
La campaña NoViolencia 2018 recorrerá España durante este año con actividades para apuntalar los cimientos de este concepto en el mayor número de personas y buscar respuesta a problemas sociales como el acoso escolar, las agresiones machistas o la falta de respeto por los semejantes mediante la ruptura de la espiral de la violencia.
Una actuación teatral organizada por el actor y coordinador de NoViolencia 2018 a nivel nacional, Moisés Matos, en el IES Pérez Galdós de la capital grancanaria congregará mañana a 600 jóvenes en un acto que busca “el intercambio de experiencias enriquecedoras” para difundir la ‘no violencia’.
Por su parte, el coordinador de la campaña en Canarias, Carmelo García, apuntó la importancia de trabajar en los centros educativos “sembrando en positivo” y, al mismo tiempo, enseñar a resolver los problemas sociales de una forma no violenta.
Los organizadores de la campaña trabajan, además, en la realización de cuatro grandes congresos para 2018 en los que recoger los resultados del intercambio de experiencias realizado en los próximos meses y proponer nuevas formas de resolver los conflictos sin llegar a la violencia.
En el mundo existen más de 25 guerras activas, en las que participan medio centenar de países que incluyen a las grandes potencias mundiales de forma directa o indirecta, a través de la venta de armas o del apoyo político.
Frente a la idea general de paz, el concepto de ‘no violencia’ implica atender a la llamada pobreza estructural, generada por el hambre y que afecta a más de 1.000 millones de seres humanos, además de los 100 millones de refugiados que emigran de sus países por culpa de conflictos armados o escasez de recursos.