Los sindicatos aseguran que el consistorio acumula deudas salariales desde el año 2013
Los trabajadores del Ayuntamiento grancanario de San Bartolomé de Tirajana han acordado no realizar más horas extraordinarias y ceñirse estrictamente a las funciones para las que han sido contratados, una vez que los sindicatos mayoritarios de la mesa general de negociación del consistorio, CCOO, UGT y CSIF, han constatado la imposibilidad de firmar un compromiso de pago efectivo con el grupo de gobierno municipal para proceder al pago de las horas extraordinarias realizadas, en muchos casos, desde el año 2013.
Los sindicatos denuncian que la perenne falta de personal en el Ayuntamiento, unido a la falta de reposición debido a las leyes de sostenibilidad presupuestaria, se ha agravado en los últimos años como resultado de las bajas de personal por jubilación y otras causas. Así, de una plantilla de más de 900 trabajadores hace unos años, se ha pasado a unos 550 de la actualidad, sin que la anterior corporación se preocupara de ejecutar las ofertas de empleo que habrían permitido, en la medida que la norma lo permitía, reponer trabajadores. El resultado ha sido un perjuicio a todos los servicios municipales que han tenido que ser atendidos por el personal restante, asumiendo tareas de aquellos que se han jubilado.
Para cubrir la carencia de personal, los trabajadores han venido realizando desde el año 2013 una ingente cantidad de horas extraordinarias, acumulando algunos empleados más de 400 horas anuales, algunos incluso con sentencia judicial, con turnos de hasta 10 y 12 horas diarias. Asimismo, los trabajadores han tenido que asumir responsabilidades que no les correspondían, como lo acreditan las innumerables sentencias ganadas en los juzgados con más de 200 casos denunciados, en su mayoría ganados y otros que aún se están tramitando. Del mismo modo a muchos empleados públicos, acudir al trabajo les ha supuesto un desembolso de su propio bolsillo, poniendo su coche a disposición de la corporación, en unos casos, comprando papel higiénico o la lejía en otros, y poniendo sus teléfonos móviles personales para coordinar los servicios, estando a disposición del responsable las 24 horas para solucionar los problemas sobrevenidos.
Esta falta de personal, manifiestan, es la pescadilla que se muerde la cola, puesto que para poder llevar a cabo los procesos de selección de personal que la Ley permite, no disponemos de personal que lo puedan ejecutar.
En el año 2018 se alcanzó un preacuerdo con el entonces grupo de gobierno PP- Agrupación de Vecinos. Con ese acuerdo se iban a pagar, entre otras cosas, las horas extraordinarias, pagos por nocturnidad y otros conceptos que buscaban regularizar la situación en el trabajo, acuerdo que a pesar de ser rubricado por el entonces concejal de Recursos Humanos, no se tramitó como expediente, ante lo que los trabajadores respondieron con una huelga que fue apoyada por la actual corporación.
Al llegar el nuevo grupo de gobierno, los portavoces de los 4 grupos políticos que gobiernan pidieron un plazo prudencial para abordar el asunto y proceder al pago de ese acuerdo. Sin embargo, los sindicatos señalan que transcurridos ya ocho meses, lo único que han recibido son dilaciones y soluciones parciales a la problemática por parte de los responsables técnicos municipales y una negativa rotunda a encontrar una solución por la Sra. Interventora, que se niega a emitir informes de reparo, sin los cuales es imposible saber qué trámite legal es necesario realizar para poder ejecutar los pagos.
Reunidos con el grupo de gobierno, el responsable de Recursos Humanos y la interventora municipal, ésta asegura que no se pueden pagar más que 80 horas extraordinarias, que es lo que marca la ley, señala. Es decir, una quinta parte de lo que han trabajado efectivamente los empleados aunque le ley, afirman los sindicatos, solo señala que no se pueden hacer más de 80 horas al año, nada dice de no pagar aquellas horas realizadas de más, derivadas de la prestación necesaria de servicios extraordinarios, como aseguran sentencias judiciales. Los sindicatos advierten que se ha producido un enriquecimiento injusto por parte del Ayuntamiento pues ha recibido un servicio que ha sido solicitado y se ha prestado con diligencia y de buen grado, pensando en la ciudadanía, y que ahora se niegan a pagar.
Las organizaciones sindicales señalan que se trata de un caso evidente que se ajusta al principio de enriquecimiento injusto, en el que la legislación permite que se adopten medidas excepcionales para afrontar los pagos.
Consultados los trabajadores en una Asamblea, éstos, de forma unánime, acordaron no realizar más horas extraordinarias y ajustar su trabajo a las funciones para las que han sido contratados.
Ante esta decisión, las organizaciones sindicales CCOO, UGT y CSIF anuncian que los trabajadores se abstendrán de realizar más horas extraordinarias, ajustando su trabajo a su jornada y funciones a la vez que reiteran a la corporación, a la que reconocen su esfuerzo, su total colaboración para encontrar una solución conjunta.