La actividad, enmarcada en el proyecto “Mi casa, mi barrio”, estuvo promovida por los colectivos vecinales y la Concejalía de Participación Ciudadana.

Las actividades voluntarias del proyecto “Mi barrio, mi casa” pretenden involucrar a la ciudadanía en el cuidado de su entorno más inmediato, entendiendo que en la calle y en el barrio se desarrolla gran parte de nuestra vida y se proyectan nuestras ilusiones y anhelos. El trabajo conjunto de los vecinos en la mejora del espacio compartido es muy positivo por diferentes razones: favorece el bienestar social, fomenta el respeto por el medio ambiente, estimula la participación de la comunidad en los asuntos que son de interés común, promueve la solidaridad y estrecha las relaciones entre las personas.
Especial mención merece la colaboración dirigida a las personas de avanzada edad que carecen de recursos y capacidad para retirar trastos y enseres de su propia vivienda o de las inmediaciones. El proyecto permite que reciban la solidaridad de sus vecinos, incluso a veces procedentes de otros barrios del municipio, que les ayudan a mejorar su vivienda y las zonas comunes de alrededor. La jornada participativa de este fin de semana concluyó con un almuerzo y una posterior velada musical, amenizada por la agrupación folclórica “Sombra del Aguayro”.