• La nueva alcaldesa de la Villa de Ingenio sostiene que en sus planes no entraba ostentar la alcaldía, sin embargo, afronta esta etapa con ilusión.
Después de poco más de una semana, desde la toma de posesión de Vanesa Martín al frente de la alcaldía de la Villa de Ingenio, sustituyendo así a José López Fabelo, la nueva alcaldesa ya ha tenido algo de tiempo para asimilar las funciones que deberá asumir durante los próximos años, sin embargo, reconoce: “En mi hoja de ruta nunca ha estado ni ser concejala ni ostentar la alcaldía”.
Martín sostiene que si ha llegado hasta este punto ha sido “para ayudar al anterior alcalde a gestionar el ayuntamiento”, no obstante se muestra ilusionada ante esta nueva etapa que se abre. “Lo cojo con ilusión y ganas, pero también con una perspectiva diferente a no solo política, sino también como ciudadana y trabajadora”, asegura. La alcaldesa de Ingenio explica que ahora lo importante es trabajar para la ciudadanía.
Con respecto a la hoja de ruta que sigue el gobierno municipal ingeniense, Martín afirma que “sigue siendo la misma, aunque quizá con otra visión de gestión”: “Nosotros tenemos nuestro programa de gobierno desde el minuto 1”. La líder de Forum Drago resalta que cada persona mantiene una manera de gestionar propia: “Nuestra visión es 50% proyectar las mejoras de nuestro municipio y el 50 restante, el día a día de nuestros vecinos”.
Asimismo y como ya hizo también durante su toma de posesión, Vanesa Martín reitera la importancia de “aunar esfuerzos para crecer”. “Siempre digo que todas las buenas ideas vengan de donde vengan son bien recibidas”, comenta. Martín manifiesta que todos trabajan para el pueblo, dejando de lado los colores políticos y poniendo el punto de mira en el beneficio de los vecinos y vecinas del municipio. “Nosotros nos hemos comprometido a sentarnos con cada uno de ellos y negociar cualquier cuestión de cualquier índole”, argumenta.
Martín reconoce que como trabajadora municipal que ha sido “es muy triste estar 4 años trabajando con un político que pone unos proyectos ejemplares sobre la mesa y que a los 4 años haya un cambio”. La falta de continuidad ante los cambios de gobierno, no solo perjudican al municipio sino también a todos los residentes en él que no terminan de ver los proyectos que se inician. “Aunque llevemos el timón del barco no hay que olvidar que no gobernamos solo para nuestros votantes, sino también para los de la oposición y considero que los 32.000 habitantes tienen el mismo derecho”, sentencia.
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